La ventanas son uno de los elementos más importantes de la casa pues  se colocan de manera estratégica para permitir la entrada de luz natural y también aire fresco durante la primavera y verano. Pero, las ventanas no están solas, tienen un gran aliado con ellas: las persianas o cortinas con los cuales es posible controlar la luminosidad que entra, además resguardan la privacidad del hogar.

Existen diversos tipos de persianas, elegir una es cuestión de gusto personal y del estilo que tenga tú hogar, así como de la ventana, su tamaño y disposición.

Persianas Venecianas u horizontales.

Se adaptan casi a cualquier concepto, son prácticas y brindan una amplia variedad respecto al material, tamaño y color. El sistema de estas persianas es de freno y rotación, lo cual permite colocar tiras en varias posiciones haciendo posible controlar el paso de luz.

Persianas Verticales.

Las tiras cuelgan en posición vertical, es un modelo conocido y popular que permite controlar en su totalidad el paso de luz. Su fabricación puede ser en tela, madera, PVC y aluminio. También se adaptan a los ambientes y permite una variedad de colores.

Persianas Enrrollables.

Modelo moderno con una gran ventaja: bloquean el paso de los rayos ultravioleta, lo cual evita el deterioro de muebles, pisos y telas. Otro beneficio es que las persianas se enrollan en la parte superior ocupando poco espacio. Se fabrican en una gran variedad de colores y se pueden cubrir ventanas de gran altura.

Persianas Panel Japonés.

Su exótico y elegante diseño las hace atractivas, este estilo es ideal para puertas corredizas o ventanas de gran tamaño. Utiliza un sistema de rieles con el que se desplazan los lienzos de izquierda a derecha y viceversa, lo cual regula la entrada de luz. Existen diferentes colores y diseños disponibles.

Persianas Blackout o de oscuridad total.

No permite la entrada de luz. Este modelo es muy popular, es útil si un cuarto necesita oscuridad absoluta y su sistema también es enrrollable.