MODELO EDUCATIVO SIMEX: 

El Modelo a seguir para formar líderes socialmente comprometidos con el fin de colaborar en la implantación del Reino de Cristo, es el mismo Cristo. “Muchos modelos se han dado para la educación, sin embargo el maestro por excelencia es Cristo”.

El Instituto México de Puebla ha ido conformando, a lo largo de más de cuarenta años, un Modelo Educativo que puede definirse como humanista, científico y trascendente, basado en la educación diferenciada. Lo anterior significa que:

 a) Somos HUMANISTAS porque partimos de la realidad humana concreta, del hombre de aquí y de ahora; de sus necesidades físicas, psíquicas y sociales.  

 b) Valoramos los avances de la CIENCIA, y los utilizamos para lograr mejores resultados en los procesos de enseñanza y de aprendizaje. En esta perspectiva nos apoyamos en la Biología, en la Psicología, en la Pedagogía y en la Sociología, y en los recientes hallazgos en Neurociencias para considerar los aspectos emocionales que intervienen en los procesos cognitivos para facilitar el aprendizaje.  

c) Nuestra visión TRASCENDENTE se fundamenta en una visión católica del hombre y del mundo (apegados en todo momento a lo que indique el Magisterio de la Iglesia), por lo cual todos nuestros actos siempre van encaminados a orientar a la comunidad educativa hacia Dios.   

En el Instituto México de Puebla se cuenta con planes y programas institucionales con el propósito de atender la educación diferenciada que manejamos y la formación integral de nuestros alumnos en cada uno de los niveles educativos, además, se definen líneas estratégicas a seguir a fin de reforzar el proyecto educativo y dar respuesta a los retos y necesidades de la Comunidad Educativa.

EDUCACIÓN INTEGRAL.

El Instituto México (IMEX),  es una institución que ha fusionado en su esencia una diversidad de corrientes pedagógicas,  con la finalidad de extraer de cada una de ellas sus mejores elementos, para  brindar una educación integral, de vanguardia y original, de ahí el proceso innovador permanente en el que se encuentra inmerso desde su origen.

El IMEX tiene claro su propósito “la formación de hombres y mujeres  íntegros, amantes de la verdad y forjadores del bien, líderes católicos, capaces de transformar la sociedad desde los diversos ámbitos en los que se desarrollen” (Ideario, 2015:2).  Por ello el eje es el alumno, al que se considera el centro de la educación y el enfoque está en su  educación integral.

Por su parte, el profesor acompaña para estimular el análisis y la reflexión y requiere de una formación para aprender con y del alumno.

De éste modo en el proceso de aprendizaje se atienden las funciones mentales superiores del cerebro, que son la fuente de la inteligencia humana.