El 15 de septiembre se acerca y con él da inicio la temporada de fiestas. Justo en esta época del año, algunas personas comienzan a pensar que sus objetivos de hacer ejercicio y comer más sano se han truncado, así que postergan su entrenamiento y se olvidan de la buena alimentación.

Lo anterior es un grave error ya que, de acuerdo con un estudio publicado en The New England Journal of Medicine, una persona puede aumentar más de un kilo durante las fiestas, este tiende a acumularse y hacerse más difícil de bajar con el tiempo.

Así que, para no caer en excesos, festejar de manera saludable y seguir por el buen camino, compartimos las siguientes recomendaciones para sobrevivir con honores (y sin kilos de más) la gran variedad de platillos que podemos encontrar en estas fechas.

- Busca el equilibrio. Si vas a tener una cena abundante es importante regular tu dieta durante el día y esta se adapte a la ingesta que tendrás en la noche. Recuerda consumir una gran porción de vegetales y verduras, elegir carne magra, beber abundante agua y no olvidar tus colaciones.

- Haz ejercicio. Según un estudio publicado en la revista Medicine and Science in Sports and Exercise, las personas que realizan regularmente actividad física suelen evitar los alimentos ricos en grasa. Lo ideal es encontrar una comunidad de soporte, como la que existe en Club Alpha, con personas que se comprometen con su cuerpo y su salud, para entrenar juntos y así te sea más fácil mantener el hábito. Además, con instalaciones como las nuestras podrás encontrar distintas actividades para ejercitarte.

- Checa los platillos. Antes de decidir que vas a comer, verifica lo que hay disponible en la mesa así evitaras comer de más y únicamente pondrás en tu plato lo necesario para tu cuerpo.

- Modera el consumo de grasa. Consume tostadas horneadas o bajas en grasa, ya que ahorra alrededor 3 gramos de grasa por tostada. Utiliza con moderación crema y queso eligiendo las opciones reducidas en grasa, ya que te brindan 50% menos grasa y contienen menos colesterol. Además, acompaña los platillos con carnes magras como pechuga de pollo, lomo o pierna de cerdo. Prefiere los alimentos al comal, ya que al cocinar los alimentos de esta forma evitas el exceso de grasa.

- El pozole ¡no engorda!. De acuerdo con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el pozole es un plato completo que contiene todos los nutrientes necesarios para la hora de la comida. Lo recomendable es comer una taza y media pozole (90 a 100gr aprox.) con 60 gr de pollo en lugar de carne de cerdo (la cual contiene más grasa, sodio y colesterol) y acompañarlo sólo con rábano, cebolla, lechuga y limón al gusto.

- Modera el consumo de alcohol. Si vas a consumir alguna bebida alcohólica, hazlo con moderación, ya que las bebidas alcohólicas están llenas de calorías vacías. Así que, si decides ingerir alguna, trata de acompañarla con agua mineral o refresco sin azúcar y tomar un vaso de agua natural por cada copa.

- Evita desvelarte. La principal causa de la obesidad es la ingesta de calorías y la privación de sueño nos hace comer de más, por eso es importante que duermas de seis a ocho horas.

Recuerda que la moderación es la clave para que puedas disfrutar de los deliciosos platillos típicos y que las porciones deben ser conscientes a tu peso y actividad diaria. Dile no a los excesos y tu salud te lo agradecerá.